Este edificio ponferradino puede considerarse la construcción más noble de la ciudad.
Construida en 1565, bajo la dirección del maestro Francisco Semper, el edificio es un claro ejemplo de arquitectura renacentista.
El palacio ha tenido diferentes usos a lo largo de su historia, casa del corregidor, cárcel, lugar de reuniones del consistorio y, actualmente, Museo del Bierzo.
La construcción es de planta casi cuadrada, estructurada en torno a un patio central. La fachada tiene una portada con arco de medio punto, flanqueada por el escudo de armas de la ciudad, un puente entre torres almenadas, y el del conde de Toreno. En el piso superior aparece un balcón de magnífica factura y, sobre éste, un remate de frontón semicircular que cobija el escudo imperial.
En el interior, alberga la colección museística del Museo del Bierzo que ofrece un amplio recorrido por la historia de Ponferrada y del Bierzo.