El Camino del Salvador, en su tramo que va desde León hasta La Robla, ofrece a los peregrinos una mezcla de paisajes urbanos y rurales, acompañada por la rica historia y la calidez de los pueblos de león.
Partiendo desde la histórica ciudad de León, el camino nos lleva a través de encantadores pueblos y paisajes rurales que ofrecen un contraste tranquilo y pintoresco con la bulliciosa ciudad. Estos pueblos, con sus casas tradicionales y acogedoras plazas, reflejan la auténtica vida rural de la provincia.
El sendero serpentea a través de verdes campos y colinas suaves, proporcionando vistas panorámicas y momentos de serenidad en contacto con la naturaleza. Los caminantes cruzarán antiguos puentes y seguirán caminos que han sido transitados por generaciones de peregrinos, sintiendo la conexión con el pasado en cada paso.
Carbajal de la Legua es el primer pueblo significativo que se encuentra en la ruta. Este pequeño y tranquilo pueblo es conocido por su iglesia parroquial y por ser una entrada serena hacia el mundo rural desde la ciudad.
Siguiendo el camino, se llega a Cabanillas, pueblo que ofrece una pausa tranquila en el recorrido y una bonita iglesia, del siglo XVII, para visitar que conserva un retablo de 1777.
Continuando, hay que atravesar los pueblos de La Seca de Alba y Cascantes, en un recorrido de casi 10 km para llegar al final de la etapa, La Robla, situada en un hermoso valle, villa que es conocida por su entorno natural y su legado industrial, ofreciendo un interesante contraste para los visitantes.