Situada a los pies del castillo, la iglesia fue restaurada y salvada del deterioro para convertirse en centro de información de peregrinos del Camino de Santiago y centro de actividades culturales y religiosas.
Fue edificada entre los siglos XV y XVII en piedra con cubierta de pizarra.
Tiene planta de cruz latina y una reseñable torre de tres cuerpos que se alza sobre la puerta principal, y en la que llama la atención su vistoso remate.
Está cubierta con bóveda de cañón con lunetos, crucero y cúpula sobre pechinas y rematada con una linterna.
Entre las joyas artísticas que alberga en su interior destaca un cristo crucificado, conocido como «El Cristo de la Fortaleza», porque procedía de la capilla templaría del Castillo de Ponferrada. Cabe mencionar el retablo barroco de finales del siglo XVIII, obra de José Ovalle y Andrés de Benavente.
La iglesia albergó la exposición de Las Edades del Hombre en 2007. Pese a no estar destinada al culto es uno de los templos más emblemáticos de Ponferrada y en su interior se encuentran algunos de los pasos más conocidos de la Semana Santa.