Conocida como “Cerca Medieval”, es un tramo de muralla de piedra edificada durante el siglo XIV sobre una anterior muro de tierra del siglo XIII. Rodeaba los barrios del sur y el oeste de la ciudad, que se encontraban fuera del original campamento legionario. A diferencia de la arquitectura militar romana, esta cerca no sigue un trazado rectangular, sino que describe un arco irregular adaptado a las particularidades del terreno.
En el XIII se unieron, debido a su crecimiento, los dos arrabales de León: el de San Martín y el de los Francos. Este recinto se protegió con una muralla de tapial que hacia 1330 se sustituyó por una cerca de cal y canto con grandes refuerzos. En 1593 se realizó una restauración de la cerca medieval. El arquitecto fue Pedro Mazuecos y el maestro de obras, Leonardo Cajiga.
Debido al crecimiento urbano y a la construcción de viviendas durante el siglo XIX parte de la muralla fue derribada por ordenanzas municipales. No obstante se puede ver un largo tramo en la conocida como Calle de las Cercas y en la Avenida de la Independencia.
En la actualidad se aprecian tramos significativos en la avenida de la Independencia y en la propia calle de las Cercas. Se caracteriza por el corredor empedrado que se forma entre una primera tapia más baja (el antemuro), y una segunda, más alta y robusta (el muro propiamente dicho), provistas ambas de almenas que las hacen más llamativas. Construida totalmente en fábrica de cal y canto encofrada, contaba con nueve puertas: Escuderos o del Peso (junto a la Torre Cuadrada o de los Ponce); Caño Badillo, tras el antiguo cuartelillo de la Policía Local; Puerta Sol; Cal de Moros o Puerta de Santa Ana; Puerta Moneda; Puerta Gallega o de San Francisco; Puerta del Burgo Nuevo o Arco de Ánimas; Puerta de Fajeros y el Postigo de la Ollería, junto al tramo occidental de la muralla romana.